En un diccionario bilingüe francés-español, una de las acepciones de suite es esta:
suite nf | (succession) | serie, sucesión nf |
fila nf |
En general todas están escritas en la misma tonalidad y tienen forma binaria, con una primera sección terminada en dominante y la segunda acabada en tónica.
En su origen, las danzas eran, aunque parezca una obviedad, para ser bailadas.
Una era lenta y la siguiente rápida, como por ejemplo en el par constituido por pavana y gagliarda.
Escuchemos este par de danzas compuesto por Luys de Milán:
Verás que la pavana está en compás binario y es lenta, mientras que la gagliarda está en compás de tres y el tempo es allegro.
He aquí un ejemplo de cómo se bailaba la pavana:
La música es de Thoinot Arbeau (Jehan Tabourot), quien hiciera el primer tratado conocido sobre coreografías, Orchesographie, Belle qui tiens ma vie.
Y mira aquí cómo se bailaba la gagliarda:
La suite fue evolucionando hacia cuatro danzas fijas: la allemanda, la courante, la zarabanda y la giga.
Como apunte al margen, Felipe II prohibió la zarabanda en 1590 en España por ser un baile con tendencia a la lascivia.
En el Barroco, la suite perdió el carácter danzable. Ya nadie esperaba bailar cuando iba a escuchar una suite.
Recuerda que en el Barroco aparecieron los primeros teatros de pago para escuchar música, es decir, comienza el espectáculo musical como empresa.
La denominación era confusa: podía llamarse suite como también partita, casación, divertimento, sonata.
Bach compuso para clavecín varias suites (recuerda que, si bien Bach conoció el piano, -Federico II de Prusia le hizo probar todos los que tenía en su palacio de Sanssouci, lo que dio origen a la Ofrenda Musical- nunca lo eligió como instrumento).
Solía encabezarlas con un preludio, al menos todas sus suites inglesas lo tienen, y solo una de sus suites francesas. Muchas veces incluyó en las suites minuetti.
Escuchemos el preludio de una suite de Bach al clavecín. Fíjate el carácter virtuosístico de estas piezas breves que abren la suite (de ahí su etimología, pre -antes-; ludio, ludo -juego u obra).
Bach escribió también suites orquestales, ya con cambios notorios en la denominación de sus números.
De la suite orquestal número 3, por ejemplo, hemos escuchado el segundo número, denominado "Air" (aire, canción).
Recordémoslo:
Y en la Suite orquestal número 2 incluyó un número llamado Badinerie, algo así como "broma". Es un número muy vivo. Escuchémoslo:
En la época clásica no tuvo la suite mayores cambios.
En el Romanticismo, en cambio, la suite adquirió una extrema libertad.
Albéniz retrata en la suite, en vez de una serie de danzas... ¡una serie de comunidades y ciudades españolas!
Así tenemos en su Suite española números como Granada, Cataluña, Sevilla, Cuba, Asturias, Aragón, Castilla...
Escuchemos Granada:
El carnaval de los animales es, pues, una suite.
Muy conocido es el número de el cisne. Escuchémoslo:
Y seguramente conocerás el llamado Aquarium:
Una suite pasó, pues, a ser una sucesión de números musicales que describían algo.
Incluso el argumento de una ópera. Es el caso de las suites de Carmen, por poner un ejemplo, o de óperas de Prokofiev, Janáček, Rimski Korsakov o tantos otros.
¡O la descripción de los planetas, según Holst!
Claude Debussy compuso una suite para piano, la Suite bergamasque, de cuatro números. También es muy conocida. Escuchemos el tercero de los cuatro números de esta pieza de 1890 del gran francés impresionista.
Y con esto terminamos el recorrido por la suite.
Cualquier duda, no dudes en preguntarme en clase.
Heyy muchisimas gracias de verdad que si! he aprendido muchisimo con este articulo gracias y ademas me ayudaste con una materia de la uni sigue asi! saludos heh
ResponderEliminarNo puedo lirlo ni verlo porque me sale una nota " no seadmite este complemento" quizas debo instalar algun programa que no tengo. Eladio que dices? Gracias
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